Glenn Clancy

Glenn Clancy

Desde sus inicios en la Disk Factory (http://diskfaktory.com/), donde desarrolló y gestionó dos departamentos  —Control de la calidad del sonido y Servicios de masterización y estudio—, a lo largo de los años ha masterizado unos 1500 álbumes. El cantante, compositor y guitarrista Gabe Bondoc, el guitarrista y vocalista Tini Grey, y la cantante y compositora Melissa Polinar son solo algunos de los artistas con los que ha trabajado. Su variado programa exige dos equipos y, durante el NAMM del invierno de 2017, tuvo la suerte de ganar un Babyface Pro de RME (distribuido en Norteamérica por Synthax, Inc.), que supuso una actualización inmediata y sustancial de una de sus configuraciones.

«Tenía conocimiento de la reputación de RME, así que es fácil imaginar mi sorpresa cuando supe que era uno de los ganadores del sorteo en NAMM», afirma Clancy. «Estaba intentado renovar la interfaz de una de mis configuraciones, y la Babyface Pro ha resultado ser la solución perfecta. La nueva interfaz se utiliza a diario con mis estudiantes para impartir clases sobre grabación y producción musical. Hace poco, empecé a dar clases de sonido para cine y vídeo que incluían doblaje, efectos de sala, diseño de sonido, bandas sonoras y tareas relacionadas. La Babyface Pro desempeña un rol central para todas estas funciones».

Glenn Clancy Babyface Pro

Cuando le preguntamos por los atributos de la Babyface Pro que le impresionaron de verdad, Clancy menciona la calidad de sonido y la versatilidad de E/S de la unidad. «La mejora del nivel de calidad de sonido fue obvia de inmediato», afirma Clancy. «La calidad de la conversión A/D y D/A de esta pequeña caja es muchísimo mejor de lo que esperaba. Es comparable a escuchar con monitores buenos en un gran entorno acústico. Y no me refiero solo al sonido de entrada. Se notó de inmediato que la conversión D/A de la Babyface Pro era más clara y abierta que con la interfaz que usaba antes. Fue como la primera vez que escuché conversores A/D y D/A de alta calidad después de escuchar a través de una tarjeta de sonido básica de juegos de PC. No me refiero solo al brillo. Es una claridad y una comodidad en los oídos que te permite distinguir todos los elementos diversos de una mezcla».

«También me encanta poder tomar la salida ADAT de mi preamplificador de micro de cuatro canales UA 4-710d y enchufarla directamente en las entradas ópticas de la Babyface Pro», prosigue Clancy. «Hace poco configuré el estudio para una sesión de efectos de sala, que, como sabe cualquiera que lo haya hecho alguna vez, tiende a ser un asunto intenso y caótico. Teníamos una capacidad de E/S más que suficiente para las entradas de micro y de auriculares sin tener que apagar los micrófonos o pasarse a un equipo más grande».

Además del rendimiento de audio y el dominio de las E/S de la Babyface Pro, Clancy afirma que le sorprendió mucho lo fácil que era ponerse en marcha con la interfaz. «Cuando configuré por primera vez la Babyface Pro, no leí el manual, porque estaba deseando ponerme manos a la obra. Supuse que la interfaz requería un suministro eléctrico externo y, por supuesto, me encontraba lejos de una toma eléctrica disponible ¡Pero resulta que la unidad funciona perfectamente solo con la electricidad del bus USB! Incluso puede suministrar alimentación Phantom para mis micros de condensador. Ya solo esta capacidad convierte la Babyface Pro en la perfecta solución portátil para cuando necesito grabar sobre el terreno con mi MacBook Pro».

Dada la sofisticación y, sí, la complejidad de muchos equipos electrónicos de estudio, Clancy quedó gratamente sorprendido por la Babyface Pro. «El mayor desafío que me encontré fue el de localizar el controlador adecuado que debía descargar para la versión de sistema operativo que utilizo en la actualidad», explica. «Una vez lo instalé, fue coser y cantar. La interfaz es muy intuitiva. Todo es exactamente donde se espera que esté».

Con casi tres meses de uso, Clancy dice que está muy impresionado tanto con la Babyface Pro como con RME/Synthax: «El personal de RME/Synthax que conocí en NAMM fue atento y genuino. Me hicieron sentir como en casa desde el principio. Kim Knoedler, Miki Takeuchi y Noelle Bonus no cejaron en su empeño de representar a la empresa positivamente. En cuanto a la interfaz, no podría estar más satisfecho. La Babyface Pro es la interfaz perfecta para cualquiera que busque una conversión de señales de calidad que sea tanto portátil como flexible. Tiene alimentación por bus, doce entradas y salidas, dos jacks para auriculares y E/S MIDI, y los controladores son sólidos como una roca. ¿Cómo no me va a gustar?»

Para obtener información sobre Glenn Clancy, llame al 714-478-3773 o escriba un correo a glennaudio@mac.com.

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